Quien te acompañará
Esta soy yo, María Martínez Diez, psicóloga por vocación y carrera. Creadora del Camino Kaizen.
No había otra opción. Toda mi vida he atraído a quienes necesitaban hablar de algo. Como un imán. Y yo lo he recibido siempre como lo más natural del mundo.
Me ha gustado siempre escuchar. Y lo que más me apasiona es comprender a las personas. Profundamente. Saber qué nos motiva y mueve. Qué necesitamos para ser felices. Por qué hacemos lo que hacemos… Y no otras cosas. El subconsciente y su funcionamiento. Uf, la mente humana es maravillosa. Y optimizarla se ha convertido en mi desafío ;).
Yo te acompañaré durante el Camino Kaizen, desarrollaré tus pasos y estaré a tu lado para ayudarte a lograr lo que deseas.
LAS PIEDRAS
De pequeña me encantaban las piedras, y las probaba... (las de la playa estaban saladitas 🙂 ). Sigo igual (aunque ya no las pruebo… porque soy mayor y demás) y, caminando por el campo o por la playa, es más fácil que me veas mirando al suelo que al paisaje.
No se puede estar más en el presente que mirando las piedras a tus pies. Este entrenamiento lo tengo desde siempre: observo detenidamente, con paciencia, me enfoco como si no existiera nada más, y veo las cualidades y curiosidades de cada cosa. Es algo que, si te fijas, todos los niños tienen: la capacidad de estar absolutamente presentes.
Además, son un símbolo de movimiento y cambio. Aquello que llamamos “piedras en el camino”, en realidad son llamadas de atención para reorganizar nuestras prioridades, y dirigir nuestros pasos a lugares nuevos que, de otra forma, no visitaríamos.
FILOSOFÍA
Nuestro lema es: “Mínimo esfuerzo para máximos resultados”
El estado natural del cuerpo es la relajación (sí, lo sé, parece raro que todas esas tensiones y nervios no sean lo normal…). Y no podemos estar relajados si nos estamos esforzando y sacrificando constantemente por todo. ¿No te has dado cuenta de que, cuando estás tranquilo, las cosas parece que vayan solas? Y que, entonces, en el momento que lo ves, te tensas, quieres controlarlo, entra el miedo y… ¡Adiós fluir!
El miedo es lo que nos bloquea siempre. Lo que pasa es que estamos tan acostumbrados a él (lo camuflamos bajo palabras como “realismo”, “precaución”, “cautela”, “dos dedos de frente”, “madurez”, “EXPERIENCIA”, etc.), que ni lo identificamos.
La buena noticia es que no es necesario que lo identifiques. Los pasos del Camino Kaizen están diseñados para que no exista miedo (incluso miedo inconsciente), y que así puedas avanzar sin darte cuenta ;). ¿A que es una estupenda noticia? Como he dicho antes “mínimo esfuerzo para máximos resultados”.
NO ESTOY SOLA
Todo en la vida siempre es mejor y más fácil en compañía. Damos lo mejor de nosotros mismos en compañía. Ya sea de amigos, familia, animales, almas gemelas,…
Este gran proyecto no podría existir de no haber sido por tantas personas que me han apoyado, ayudado y confiado en mí todos estos años. Sin ir más lejos, el nombre y el logo me ayudó a pensarlo un gran amigo que además lo diseñó. Y esta web existe gracias a otro gran amigo. Amigos, y clientes que se han convertido ya en amigos, me han asesorado sobre los textos y cómo mejorar la explicación para que se entienda lo mejor posible (he recibido correcciones en rojo y todo, como en el cole). También han experimentado en persona el Camino Kaizen, para optimizarlo al máximo con su feedback. Hay pedacitos de todos ellos en cada rincón, y me encanta. Gracias de corazón.
Tras la que escribe, hay personas que creen en este proyecto y que colaboran en él para que tú puedas comenzar tu Camino Kaizen. No podría hacerlo sola.
Además, tengo la enorme suerte de contar con un socio excepcional que también es mi compañero de vida y alma gemela. Con él hablareis en más de una ocasión :).